De
nuevo, fin de semana. Y todo indica que con mejor tiempo del que hemos tenido
hasta ahora, aunque conviene recordar que la necesidad de agua es enorme y que
lo mejor que podía suceder es que siguiera lloviendo. Pero como nosotros no
podemos cambiar casi nada y menos los asuntos de la meteorología, nos adaptamos
a lo que hay, y a esperar que este grave problema de sequía acabe pronto. A lo
que vamos es que este fin de semana, sin embargo, parece que nos permitirá desplazarnos
con algo más de comodidad y seguridad, porque a nadie se le escapa que circular
con agua en la calzada es un peligro añadido que no todos sabemos eludir y que
está comprobado aumenta significativamente el número de accidentes y víctimas.
Sin ir más lejos, estos cuantos días pasados por agua han confirmado lo que les decimos porque se ha engrosando la
estadística de accidentes que confecciona Tráfico.
Por
eso conviene recordar que ahora es el momento de recapacitar y decidir si
debemos mantener, por ejemplo, los neumáticos a los que les hemos sacado más
kilómetros de los aconsejados o por el contrario decidimos su renovación. Y es
que si durante el tiempo seco han ido tirando y han soportado los esfuerzos a
los que los hemos sometido, con agua en la calzada es todo lo contrario, puesto
que una simple frenada puede acabar echándonos a la cuneta o sobre otro
vehículo. Por supuesto, aceptamos las justificaciones con las que solemos
acompañar los argumentos que usamos para evitar esta renovación, como es el
caso de la crisis o de que no están los tiempos para inversiones que pueden
esperar, pero no las compartimos. Lo queramos o no, al final se acaba pagando
con creces este tipo de pérdida de la realidad, ya que no faltan los que se
proponen reducir la velocidad, respetar más la distancia de seguridad, o frenar
con cautela entre otras medidas, sencillamente porque se trata de un brindis al
sol y no de una actitud realista y positiva.
Volvemos
a repetir que cuanto antes asumamos que la meteorología interviene directa y
peligrosamente sobre la circulación, mejor para nuestra integridad y seguridad
para la circulación en general, ya que poner en marcha nuestro vehículo supone por
sí mismo alterar las condiciones generales de nuestro entorno, ya sea en la ciudad
o en la carretera. Cuando les decimos que dejar para mejor momento la
renovación de los neumáticos o la revisión general del automóvil es algo que
está demasiado extendido entre los conductores/propietarios, nos basamos en los
datos que nos proporcionan los organismos que controlan este tipo de anomalías.
Por ejemplo, las estaciones de inspección técnica de vehículos, que vienen
anunciando no sin preocupación que aumenta el número de propietarios de
vehículos que no acuden a la obligada cita que tiene con estos controladores
oficiales de nuestros coches. Y no crean que los que se encargan de los seguros
están en mejores condiciones, porque se equivocan. Al contrario, la crisis está
siendo presentada como excusa por parte de quienes menosprecian esta obligación
y deciden circular sin seguro. Las consecuencias de esta peligrosa decisión las
conocemos precisamente cuando más falta nos hace, es decir, cuando se produce
un accidente, y no solo porque la reparación de los vehículos accidentados
necesite de dinero, sino porque de por medio hay personas que quedan
desamparadas y sin posibilidad de ser compensados económicamente por las
lesiones causadas.
Por encima de cualquier otro planteamiento, la mejor decisión que podemos tomar es la que nos sitúa al frente del volante de nuestro automóvil con los deberes hechos y la documentación al día. De no ser así, dejarlo en el garaje o aparcado en la calle no creemos que sea una decisión descabellada si tenemos en cuenta las consecuencias de todo tipo a las que con toda seguridad nos enfrentaremos. No obstante, la decisión final es de ustedes y les corresponde escoger lo que mejor les venga. Solo queríamos hacerles llegar nuestra opinión y es evidente que los hemos hecho. Feliz y seguro fin de semana.